Integrando elementos deportivos con enfoque de inclusión, se capacitaron a más de 230 niñas y niños refugiados y migrantes, así como de la comunidad de acogida, sobre responsabilidades y derechos dentro de un marco de convivencia pacífica y prevención a la xenofobia.
Las diferentes sesiones giraron alrededor de temáticas asociadas a la creación de nuevos vínculos participativos que inculquen el respeto de los niños, niñas y adolescentes, que están llegando a la comunidad y motivar todos los aportes que generan.